lundi 23 juillet 2012

Un deber de memoria


Ayer domingo, dos eventos estuvieron en primera plana de las noticias en Francia: la etapa final del Tour de France, con su tradicional llegada a los Campos Elíseos, y el discurso del presidente frente a la placa conmemorativa de la redada del Vél d’Hiv, un suceso que calificó como “un crimen cometido en Francia por Francia”. Con esta declaración, Hollande sigue los pasos de Chirac, que había sido el primer presidente en reconocer la responsabilidad del Estado en el arresto, en julio de 1942, de más de 13000 judíos, que fueron agrupados en el velódromo de invierno de París durante varios días, antes de ser enviados a Auschwitz. Hay quienes argumentan que el verdadero gobierno de Francia en aquella época era el de la resistencia, exiliado en Londres, y no el de Vichy, que ordenó esta redada. Pero lo cierto es que, como recalcó el presidente, fue la policía francesa quien llevó a cabo esta operación, sin que participara ningún alemán. La colaboración con el régimen Nazi es un capítulo oscuro de la historia del país, pero Hollande ha hecho bien en recordar este hecho, por más doloroso o vergonzoso que sea, y en insistir en la importancia de que se enseñe en las clases de historia. Por lo visto, por ahora ese no es el caso, pues según una encuesta realizada recientemente, 42% de los franceses entrevistados no sabían lo que era la redada del Vél d’Hiv. Ojalá que se dé a conocer, y que a través del conocimiento de los horrores de la historia, cambien las mentalidades de aquellos que, setenta años más tarde, cometen aún actos antisemitas en este país.

mercredi 4 juillet 2012

Orgullosa de Francia


El sábado pasado se celebró en París  la « Marche des Fiertés », mejor conocida en la lengua de Shakespeare como la Gay Pride. Este desfile, que siempre se ha distinguido por su colorido, sus disfraces y su sentido del humor, pero también por sus reivindicaciones, tuvo este año un ambiente más festivo que de costumbre. El día anterior, el primer ministro había anunciado que próximamente el gobierno autorizaría el matrimonio entre homosexuales y les permitiría adoptar. Algunas de las personas entrevistadas durante la actividad se mostraron algo escépticas ante esta declaración, y es natural; después de tanto reclamar la igualdad de derechos, a algunos se les hace difícil creer que una medida como ésta esté a la vuelta de la esquina. Pero ayer, durante su discurso ante el Parlamento, el primer ministro volvió a mencionar el tema, precisando que las parejas homosexuales podrán casarse y convertirse en padres adoptivos a partir del primer semestre de 2013.

Hay que regocijarse de que Francia se dé cuenta por fin que el principio de igualdad que forma parte del lema de la república, se aplica también a las personas del mismo sexo que quieren unirse a través del matrimonio y fundar una familia. Ojalá que las mentalidades de aquellos que a estas alturas siguen oponiéndose a ello no tarden en evolucionar.